La poesía no lleva a ninguna parte




La poesía no lleva a ninguna parte.
Intento fundar mi propio alfabeto.
Desprestigio infundado: mi punto de vista
de donde nunca vino nada bueno.
Risas, bofetadas escarlatas,
solidaridad de hojalata.
Enterrad los cadáveres políticos.
Paroxismo de la tiroides ¡ sálvame ¡

Aunque me pesen mil dolores medianos,
herejía inducida por el polvo y el dogma,
utensilios de escritorio sin forma,
mis limitaciones son representadas
con púas y dientes,
venenosas iguanas miserables.
Cometido del exaltado:
revolucionar la realidad del intolerante.